El celular vino para facilitar nuestra vida. ¿Pero será que debemos usarlo a cualquier momento? ¿Cómo usarlo cuando se está en el tránsito? En el mundo conectado, ¿prohibir el celular en las vías puede volverse obsoleto?
Los avances tecnológicos generan nuevos comportamientos y, por tabla, levantan nuevas cuestiones. Sin embargo, una cosa hoy es cierta: dependiendo del uso que es hecho, un aparato celular puede causar muchos daños mientras estamos en el tránsito. Estudios muestran que cerca de un tercio de los accidentes de tránsito en el mundo son causados por distracciones dentro del carro, lo que incluye también el uso del celular al conducir.
Y el motivo para eso es bastante evidente: para conducir un vehículo, necesitamos tener un alto grado de atención. No es algo sencillo, y es necesario tener noción de que no estamos solos en las calles.
Según datos del Seguro DPVAT, son registrados cerca de 1,3 millón de accidentes por año relacionados al uso de aparatos celulares. Peor que eso es saber que el 80% de los conductores entrevistados admiten hacer uso del celular y otras tecnologías que generan distracción al volante.
De acuerdo con el Departamento de Transportes de Estados Unidos, la persona que digita un mensaje de texto mientras conduce aumenta en 23 veces la posibilidad de sufrir o causar un accidente, mientras que una llamada aumenta 6 veces esa probabilidad.
Una cuestión también recurrente es sobre el uso del GPS, que se muestra esencial hoy en día. Pero él también nos puede distraer, principalmente si no tuviéramos en el carro un soporte para el celular. ¿Cómo proceder? La indicación, en ese caso, es digitar el trayecto cuando el carro todavía está parado. Es importante tener el hábito de mantener una planificación en ese sentido. Al final, con un grado de distracción creciente a nuestro alrededor, necesitamos pensar en maneras concretas para mantener la seguridad.
Y es por eso que, en el mes de mayo, Dialogando abrirá espacio para discutir la importancia de la concientización del uso del celular en las vías, porque “Dialogando uno transforma”.